Daniel Gascón

MEMORIAS DEL RÍO

Marin Bagues

1.

Por las mañanas mi padre se iba a correr al parque del Tío Jorge, al otro lado del río. En esa época, yo pensaba que el Tío Jorge, un héroe de la Guerra de la Independencia, era un familiar nuestro que tenía un parque.

Mi abuelo trabajaba en la oficina central de SPAR, también al otro lado del Ebro. Los viernes por la tarde íbamos con mi madre a recogerlo. Me gustaba pasar el río en el coche, un Renault 8 de color verde que a menudo había que arrancar con manivela.

Mi abuelo hablaba a veces del Pozo de San Lázaro, que se había tragado un autobús. Me decía que los romanos habían canalizado el río, que antes cubría menos y ocupaba un territorio más amplio, y que en tiempos de los romanos había un puerto fluvial en el Ebro. También admiraba el Puente de Santiago, que, en un prodigio de ingeniería, cruzaba el río en dos arcos.

Un día hicimos una excursión con la clase de segundo de Preescolar para ver el parque del tío Jorge. Me acuerdo de que mi padre fue el guía y de que vimos a unos tipos que pescaban ilegalmente en la ribera. Pero no me acuerdo por qué mi padre hacía de guía en el parque.

Ya he dicho que me gustaba cruzar el río en el coche, pero me impresionó todavía más cruzar el estuario del Tajo en Lisboa.

El estuario del Amazonas, decía mi abuelo, tenía más de doscientos kilómetros de ancho.

Las grandes ciudades, decía mi abuelo, tienen ríos: París, Londres, El Cairo… La economía egipcia cambió gracias a la presa de Asuán. En Ejulve –su pueblo– solo tenemos el Guadalopillo, que no es río ni es nada.

Erosión, transporte y sedimentación: el Ebro iniciaba en Zaragoza el curso bajo y los sedimentos creaban islas muy fértiles y el terreno productivo del delta, en la desembocadura.

Nuestras vidas son los ríos que van a dar en la mar, decía mi abuelo, recitando con una voz un poco anticuada y levemente ridícula.

A nuestro primer perro, Pluto, un cocker spaniel de color canela, le gustaba bañarse en los ríos y se tiró al Ebro un día que fuimos de excursión al galacho de Juslibol.

Vivíamos cerca del puente de Hierro, que había sido gris toda mi infancia y un día se volvió verde.

Cumples cien años y te ponen verde, qué poco respeto, decía mi abuelo.

Una amiga de mis padres era de Mequinenza. Con mi padre hablaba de la vieja ciudad y de Jesús Moncada, que escribía sobre esa vieja ciudad sumergida.

En 1997 escribí una reseña de Historias de la mano izquierda de Jesús Moncada y dije que a veces parecía un Bohumil Hrabal a la orilla del río.

En las dedicatorias que escribía para mi padre, Jesús Moncada dibujaba cocodrilos, que según él venían por el Ebro.

2.

Salí con un par de chicas que vivían en el Actur. Me hacía mucha ilusión ir a buscarlas de noche, cruzando el puente mientras en la radio del coche sonaba “Jersey Girl” de Tom Waits, donde el protagonista cruza el puente para recoger a su chica. Pero la verdad es que ellas casi siempre acudían al centro en autobús.

La primera vez que ella vino a verme a Zaragoza la llevé a la Arboleda de Macanaz.

Cinco años después, era mi novia de toda la vida y caminábamos melancólicos una tarde de otoño en el Puente de Piedra cuando una señora se mareó en lo alto del puente y tuvimos que ayudarla. Luego la señora nos dijo: Qué rápido pasa la vida. Aprovechad ahora que sois jóvenes. Mi novia y yo nos quedamos mirando el agua negra. Los dos sabíamos que íbamos a romper.

Una compañera de clase tenía un piso frente al Ebro. Era guapa, pero había algo que me distanciaba de ella. Aun así, a veces pensaba que estaría bien salir con esa chica: me habría gustado despertarme delante de un ventanal con vistas al río.

3.

En Cuentos de San Cayetano, José Antonio Labordeta tiene un  cuento hermoso y terrible que sucede en el Ebro, “Las almadías”. El relato está dedicado al escritor Félix Romeo, que rastreó las hemerotecas para preparar la edición de un libro de Labordeta, Tierra sin mar.

A Félix Romeo, como al pintor Pepe Cerdá, le gustaba mucho el cuadro Los placeres del Ebro, de Marín Bagüés.

Algunas tardes de verano íbamos a jugar a fútbol en un campo de la Almozara. En una de esas ocasiones, el escritor Ismael Grasa se metió en el Ebro hasta la cintura después del partido. (A Ismael Grasa también le gusta Marín Bagüés.)

El trasvase era una amenaza y nos gustaba Arundhati Roy porque había escrito contra los destrozos ecológicos y humanos que provocan las grandes obras hidráulicas.

El puente de Hierro sale en Una de zombies de Miguel Ángel Lamata y en un videoclip de Amaral.

Cuando se celebró la Expo 2008, a todos nos gustaba cómo habían quedado las riberas.

El día en que la editorial Xordica, que ha publicado libros de Labordeta, de Moncada, de Félix Romeo, de mi padre y los míos, cumplió sus primeros quince años, celebramos una fiesta a la orilla del río.

En la fiesta, un profesor de Filosofía le dijo a un invitado: Eres un kantiano. El otro respondió: ¿Qué me has dicho? Te rompo la cabeza. (Hace poco, una discusión muy parecida terminó con un tiroteo en Rusia.)

A Félix Romeo le gustaban las terrazas de la orilla del río. Una de sus preferidas era el Pastís. Uno de sus últimos artículos fue una defensa del local, porque una ordenanza municipal amenazaba con cerrarlo.

4.

Yo acababa de volver a Zaragoza y me fui a hacer una entrevista de trabajo, justo enfrente del río. Llegué con un poco de tiempo y me quedé mirando una máquina que intentaba dragar el río para que pasaran los barcos de la Exposición. Me acuerdo de que grabé a la máquina trabajando y de que, como iba a empezar a trabajar en la tele, mi iniciativa me pareció muy adecuada.

Me quedé a la sombra un buen rato. Cuando pienso en esos momentos, me acuerdo de uno de los mejores cuentos de Félix Romeo, un relato que se llama “En una isla flotante”. El protagonista lleva cuatro años trabajando en una idea sobre el río:

Mi proyecto para el máster de Urbanismo que intento acabar es tan sencillo y utópico como estúpido: crear un barrio que esté a ambas orillas del río. El barrio estaría unido por una isla flotante, en la que se construirían las infraestructuras comunes: un centro de salud, la guardería, un centro cultural, un lugar de juegos y también un mercado. La gente accedería fácilmente por las dos orillas, que serían espacios de un mismo parque dividido por el agua, y compartiría espacios comunes en esa isla flotante.

El protagonista, además, tiene problemas con su novia, que se llama Natalia. Como Félix Romeo, el protagonista es hijo de policía, y regresa a un lugar donde se produjo un crimen –el asesinato de una niña– que su padre no supo resolver. Como el propio Félix  en Noche de los enamorados, intenta resolver un crimen.

Esa historia, aparentemente leve pero perturbadora y profunda, es uno de mis relatos preferidos.

Félix Romeo quería hacer un programa sobre crímenes no resueltos en la televisión aragonesa.

5.

A los zaragozanos nos gusta ver las crecidas del río. A mí me gusta, era una de las cosas que prefería de cuando trabajaba en la tele. A mi madre le gusta y a muchos de mis amigos, que no sienten mucho interés por la naturaleza, también. En verano, ver el río seco es como visitar a un pariente enfermo. En primavera, ver el río lleno produce energía. Llevamos miles de años intentando domesticarlo, poniéndole diosas de la fertilidad y vírgenes y máquinas de dragado, pero todavía conserva algo poderoso, amenazador y salvaje.

Un invierno, volviendo de la tele, me encontré en la calle con José Antonio Labordeta y con Juana de Grandes, su mujer. Habían ido a ver la crecida.

Cuando murió Labordeta, me pidieron un artículo y hablé de ese encuentro: era la última vez que había visto a José Antonio Labordeta por la calle.

Félix Romeo me escribió después de leer el artículo: “Me encanta lo de la crecida del Ebro”.

[Este texto aparece en Historias del Ebro, editado por Rey Lear. En la imagen, Los placeres del Ebro.]

AVENTURAS EN LA PÁGINA ESCRITA

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1.

El regreso de Simenon, por Julian Barnes.

2.

El proyecto cultural de John Updike, por Louis Menand.

3.

Juventud y sintaxis: Arcadi Espada sobre Camba.

4.

El don de la ebriedad: Gregorio Morán sobre Malcolm Lowry.

5.

Recordando a Peter Matthiessen y Patrick Leigh Fermor.

6.

Pablo Simón: La democracia según John Stuart Mill.

7.

Por qué fue importante Gary Becker.

[Imagen.]

EL MUNDO ES LO QUE ES

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1.

El informe de Human Rights Watch sobre la represión en Venezuela.

2.

Lo que necesitas saber sobre el secuestro en Nigeria.

3.

La guerra contra la educación, por Gordon Brown.

4.

Escribe José Fernández-Albertos:

«En primer lugar, conviene recordar una de nuestras especificidades nacionales: nuestro mercado de trabajo, excepcionalmente segmentado entre trabajadores indefinidos y trabajadores precarios y temporales. No es ningún secreto que esta dualidad en el mercado de trabajo castiga particularmente a algunos grupos más que a otros, ni que entre los grupos más castigados (esto es, que acaban más concentrados en la precariedad) están los inmigrantes. Los trabajadores precarios no sólo disfrutan de peores condiciones de trabajo, sino que además sufren mucho más los costes de ajuste en periodos de crisis, al ser para las empresas más fácil deshacerse de ellos que de los demás. La excepcional segmentación laboral española podría explicar por qué los inmigrantes compiten sólo de manera limitada con los trabajadores nativos en el mercado de trabajo, y esto a su vez haría que no fueran percibidos por estos últimos como una “amenaza” que presiona a la baja sus sueldos y sus condiciones laborales. Dicho de otra forma, como los inmigrantes participan desproporcionalmente en un segmento relativamente diferenciado del mercado de trabajo y cuya existencia sirve de colchón para los trabajadores nativos mejor protegidos, éstos podrían estar tolerando mejor su presencia que en otros países donde la competición laboral entre nativos e inmigrantes fuera más evidente.

Junto a la dualidad en el mercado de trabajo, otra bien conocida peculiaridad española es que tenemos un Estado del bienestar especialmente poco redistributivo. En términos comparados, y contra lo que se dice, a quien nuestro Estado trata particularmente mal no es a las clases medias, sino a los grupos más desfavorecidos. Así, después de la intervención del Estado en forma de impuestos y transferencias, en España apenas logramos reducir las diferencias de ingresos entre ricos y pobres (o, desde luego, lo hacemos en mucho menor medida que en la mayor parte de los países de nuestro entorno). Para los inmigrantes esto tiene una implicación muy clara: tienen un  Estado que, si bien les garantiza servicios básicos de sanidad y educación, no protege sus bajos y erráticos ingresos. El resultado es que, a diferencia de otros países, los inmigrantes en España apenas son percibidos por los nativos como un lastre fiscal para el Estado. No es seguramente casualidad que muchos de los nuevos movimientos políticos contrarios a la inmigración hayan emergido en entornos, como Escandinavia, donde los Estados del bienestar son particularmente generosos con los sectores económicamente más vulnerables».

5.

«El origen de la ética no es Dios, sino los simios«, dice Frans de Waal.

6.

«La política en España se ha convertido en literatura: todo el mundo escribe y nadie lee», dice Arcadi Espada.

7.

Iliah Erenburg pasa por Aragón:

“¡Será tu impulso, corazón! / Quemado y rojo Aragón. / Ni un árbol ni un matojo, / rocas tan solo y bochorno. / ¡Lo darías todo por un sorbo! / Balas, polillas diminutas. / Has de correr y conseguir llegar… / Y recordar cómo de niño te llamaba tu mamá. / Las piedras rojas. El humo azul. / Un cañoneo breve; el crepitar / de las ametralladoras, que callan luego. / Fue aquí, guerra, donde te encontré. / Sueño profundo, sopor del mediodía. / Extremo de desesperación es Aragón” .

8.

David Trueba: Deudas y Somarda.

[Imagen.]

LA MALDICIÓN REACCIONARIA

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1.

Escribe Fernando Savater:

La Europa actual, que se prepara para unas elecciones presumiblemente trascendentes en mayo, afronta como reto de fondo —más allá de esas urgencias puntuales de disensión o agravio entre países deudores y países acreedores que con razón ahora tanto nos preocupan— el esbozo imprescindible de en qué debe consistir la ciudadanía democrática. Porque existen identidades colectivas prepolíticas que son obstáculos para el desarrollo de la ciudadanía. Durante sus inicios en la modernidad, la democracia tuvo que enfrentarse a las identidades genealógicas de reyes y aristócratas, así como a las confesiones religiosas que pretendían definir al país (“la católica España”, “la piadosa Italia”, etcétera); hoy, la democracia europea tiene que vencer el enquistamiento nacionalista, tanto de los euroescépticos de Inglaterra, Holanda, Dinamarca o Francia como de los separatistas en Cataluña o Escocia que pretenden deshacer sus Estados multiculturales respectivos. Aunque estos separatistas se proclamen favorables a Europa, en realidad pretenden estrechar aún más el filtro de la identidad nacional como requisito para disfrutar de derechos cívicos, excluyendo de ellos a parte de sus hasta ahora compatriotas con el pretexto de crear nuevos Estados identitarios.

En todos esos casos siempre se trata de la maldición reaccionaria de la identidad predeterminada, es decir, de la veneración proclamada de las raíces: porque esas raíces, sean étnicas o religiosas, están siempre ancladas en el pasado mientras que la concepción progresista exige, por el contrario, que nuestras verdaderas y venideras raíces estén en el futuro, en aquello hacia lo que vamos juntos y no en eso de lo que venimos por separado.

La ciudadanía por la que merece la pena luchar es aquella según la cual el individuo obtiene derecho a la participación política, la protección social y los servicios básicos con abstracción de cualquiera de sus determinaciones previas genealógicas, étnicas, culturales, de género, etcétera, solo por el compromiso de aceptar las leyes. Quien acepte este fundamento común de ciudadanía, está luego en libertad de elegir sus identidades sucesivas y revocables en materia política, religiosa, cultural, erótica, etcétera. La ley compartida y la renuncia al privilegio de ser nada predeterminado le autorizará después a ser diferente a cualquiera de los demás a partir de ella. Por ahora, esta concepción ciudadana solo la garantizan los Estados democráticos realmente existentes (aunque a veces con preocupantes restricciones), por lo que los separatistas que piden una Europa “no estatista” encarnan en realidad la reacción del Antiguo Régimen contra ella. Quizá mañana pueda llegar a tener un alcance realmente cosmopolita, como anhelan quienes exigen instituciones de justicia universal y la defensa sin fronteras ni ventajismos de los derechos humanos.

2.

Vermont contra la ciencia y una comparación odiosa:

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Lógicamente, José Bové (retratado por Grañena) está en contra de la reproducción asistida.

3.

Sam Harris y Ayaan Hirsi Ali: una conversación. Y Timothy Garton Ash: De la fetua al WhatsApp.

4.

Shlomo Ben-Ami:

El nacionalismo es esencialmente una creación política moderna envuelta en el manto de una historia y recuerdos comunes, pero una nación ha sido con frecuencia un grupo de personas que mienten colectivamente sobre su pasado lejano, un pasado con frecuencia —con demasiada frecuencia— reescrito para que cuadre con las necesidades del presente. Si Sansón fue un héroe hebreo, su némesis Dalila hubo de ser una palestina.

Tampoco las lealtades étnicas han coincidido siempre con las fronteras políticas. Incluso después del desmembramiento violento de la Yugoslavia multiétnica, ninguno de los Estados sucesores puede afirmar ser totalmente homogéneo. Las minorías étnicas de Eslovenia y Serbia (aun excluido el Kosovo albano) representan entre el 20 y el 30 por ciento de la población total.

5.

En Sonámbulos: Cómo Europa fue a la guerra en 1914 (Galaxia Gutenberg) cuenta Christopher Clark:

Lo que apuntalaba la idea de la «unificación de todos los serbios» era una imagen mental de Serbia que tenía poca relación con el mapa político de los Balcanes al final del siglo XX. Su expresión política más influyente fue un memorándum secreto que escribió el ministro del interior serbio Ilija Garašanin para el príncipe Alexander Karadjordjević en 1844. Conocido tras su publicación en 1906 como Načertahije (del antiguo serbio náčrt, «borrador»), la propuesta de Garašanin esbozaba un «Programa para la política nacional y exterior de Serbia». Sería difícil exagerar la influencia de este documento en generaciones de políticos y patriotas serbios; con el tiempo se convirtió en la Carta Magna del nacionalismo serbio. Garašanin abría su memorándum con la observación de que Serbia es «pequeña, pero no debe permanecer en esta condición». El primer mandamiento de la política serbia, argumentaba, debía de ser el «principio de unidad nacional»; con eso se refería a la unificación de todos los serbios en las fronteras de un Estado serbio: «Donde vive en serbio, eso es Serbia». La plantilla histórica para esa amplia visión del Estado serbio era el imperio medieval de Stepah Dušan, una gran extensión de territorio que abarcaba la mayor parte de la actual república serbia, junto a toda la Albania actual, la mayor parte de Macedona, todo el centro y el norte de Grecia, pero no Bosnia, lo que resulta interesante.

Clark añade en una nota:

El autor del texto en el que se basaba Načertahije era el checo František Zach, cuya plantilla contemplaba una organización federal para los eslavos del sur. Pero donde Zach había escrito «eslavo del sur» Garašanin escribió «serbio». Este y otros cambios transformaron la visión cosmopolita de Zach en una manifiesto nacionalismo serbio.

6.

Imperialismo lingüístico: El mundo según Putin.

[Imagen.]

MÁS EUROPA Y MÁS DEPRISA

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1.

Una conversación entre Jean-Claude Juncker y Martin Schulz.

2.

Xavier Vidal-Folch: Más milagros y más deprisa:

Queridos candidatos: no empecéis la campaña europea igual que la sempiterna querella provinciana. Que si qué mal lo hizo mi rival (en España). Que si cuánto se lo llevan crudo (en España). Que si mañana, tarde y noche, quiero una consulta (en Cataluña). Hablad de Europa: de qué soluciones proponéis para los problemas de los europeos. De las recetas para el continente y de las recetas continentales aplicables aquí. Pero basta ya del autista disco rayado localista, solo hispano-español.

No olvidéis que lo que les quita el sueño a los europeos es el paro, primera preocupación del 78% de los ciudadanos; y del 94% de los españoles, el 97% de los italianos, el 99% de los griegos. Ya sabemos que la UE dispone de pocas competencias para luchar contra el desempleo. Pero cada vez tiene más. Incluso dispone de una (aún exigua) partida presupuestaria de 6.000 millones en siete años (y para 28 países) destinada a la “garantía joven”: ofrecer empleo o formación en los cuatro meses siguientes al final de los estudios. Explicadnos mejor si la queréis aumentar, con el dinero sobrante: hay hasta 60.000 millones disponibles del anterior paquete presupuestario. Hasta cuánto. Cómo. Con qué mecanismos en las oficinas públicas de empleo (que capotan) y en las agencias privadas (tan constreñidas). El empleo depende sobre todo del empuje de la economía. Pero también de esas“políticas activas”, siempre por estrenar.

Y así con lo demás. Con la recuperación de los —declinantes— servicios mínimos del Estado del Bienestar. Con la inmigración interna, rentable como saben los sabios e ignoran los xenófobos. Con el suministro de energía, cara, e insegura como descubrimos con Ucrania. Con la voluntad de seguir siendo alguien en el mundo, o desvanecernos sin remedio.

Brindad respeto a la entereza de la gente en este lustro, a su esfuerzo en impuestos, en salarios, en sacrificios sociales. Muchos profetas auguraban que la UE desaparecería. Que su símbolo, el euro, se rompería. Jugaba a su favor la más letal crisis económica desde nuestros abuelos, la más insidiosa y recidivante: ya de las finanzas de Wall Street (y sus clientes de aquí), de la deuda soberana (sureña), de la economía real (doble recesión), o de la banca (en todas partes). En fases sucesivas o solapadas. O ambas cosas a la vez.

Pero las negras profecías fueron falsas.

3.

Europa inquieta, por Nacho Segurado.

4.

Torreblanca: ¿Quién gobernará después del 25 de mayo? Elegir sin debatir.

5.

¿Por qué los líderes europeos son irresponsables?: una conversación con Luuk van Middelaar.

6.

Münchau sobre las elecciones y el equilibrio de poderes.

7.

Edad e intención de voto.

8.

Una advertencia de Charlemagne.

9.

Politizar Europa y una petición.

[La imagen es de Encadenados.]

¿QUÉ PUEDE SER MÁS INTERESANTE?

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1.

¿Qué puede ser más interesante que el funcionamiento de la mente? Una entrevista con Steven Pinker.

2.

El espectáculo de vida: Arcadi Espada sobre Mario Bunge. Y una entrevista de Juan Claudio de Ramón.

3.

Nature y nurture.

4.

¿Cómo habla la memoria?

5.

La difícil búsqueda de las niñas robadas de Nigeria, por Alexis Okeowo.

6.

Gary Becker: Alma de la Escuela de Chicago, por Pablo Rodríguez Suanzes.

7.

Intelectuales después del poder, por Ramón González Férriz.

8.

¿Necesitamos ciencias feministas?

9.

Realidades separadas.

[Imagen, de Alex McLean.]

 

TODO LO QUE SÉ DE MORAL LO APRENDÍ EN EL FÚTBOL

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Albert Camus dijo que «lo poco que sé de moral lo he aprendido en los campos de fútbol y en los escenarios del teatro». Alrededor de los primeros, como muestran algunas noticias de los últimos meses, también se pueden aprender otras cosas.

1.

Dice la página del Atlético de Madrid: “El Atlético renueva su vínculo con Azerbaijan. La entidad rojiblanca ha ampliado este sábado 1 de marzo el acuerdo estratégico de colaboración que mantiene con la ‘Tierra del Fuego’ como sponsor oficial del equipo desde la temporada 2012/13”. Según el presidente del club, Enrique Cerezo, “como dos compañeros de viaje que emprenden un sendero común que les permite desarrollar múltiples acciones conjuntas. En tan sólo un año, hemos sido capaces de proyectar la imagen de Azerbaijan por el mundo y fomentar las relaciones bilaterales entre nuestros países”.

Continúa la página web del club rojiblanco: “De esta forma, Azerbaijan seguirá vinculada a nuestra entidad en calidad de sponsor de la camiseta, como hasta ahora ha venido ocurriendo, con el fin de promover la imagen del país caucásico y seguir desarrollando acciones en el ámbito deportivo, empresarial e institucional, dando a conocer los recursos y bondades de Azerbaiyán a todo el mundo”. (En la web predomina el uso de la forma Azerbaijan sobre Azerbaiyán, que es la que recomienda la el Diccionario Panhispánico de Dudas. Pero, como se ve en la cita, el club puede usar las dos formas en el mismo párrafo: empiezas apoyando un régimen dictatorial y te acabas saltando las normas ortográficas y editoriales.)

En inglés, la web del club dice que es “mucho más que un patrocinio”. La revista Index on Censorship habla de las restricciones a la libertad de expresión en ese país de tantas bondades:

Está el caso de la periodista Khadija Islamova, que ha sufrido el acoso y el chantaje de las autoridades; del periódico Azadliq, ganador de un premio de Index on Censorship, amenazado con la ruina financiera causada deliberadamente por agencias estatales; de Idrak Abbasov, asaltado brutalmente por atreverse a informar de las demoliciones de casas realizadas por la compañía petrolera estatal. También está Rafiq Tagi, un columnista asesinado cuyo verdugo nunca ha comparecido ante la justicia; los blogueros disidentes Adnan Hajizade Emin Milli, encarcelados por hooliganismo después de acudir a la policía para denunciar que habían sido asaltados; el reportero Eynulla Fatullayev, encarcelado durante cuatro años y sobre quien han recaído acusaciones falsas relacionadas con las drogas; el periodista crítico Elmar Huseynov, asesinado en 2005.

El Barcelona recibe el patrocinio de Qatar, un país que no respeta los derechos humanos.

2.

Ignacio Escolar ha escrito:

Algunos números. La deuda con Hacienda que acumulan entre todos los equipos de primera y segunda división suma 596 millones de euros. Por comparar, es el equivalente a 33 años del actual presupuesto del Gobierno para las becas Erasmus, o lo que gasta en diez años el CNIO, el puntero centro de investigación español contra el cáncer, que está pasando por un ERE. O el doble de lo que cobran durante un año los 15.000 investigadores y científicos contratados por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, el CSIC. Solo con lo que debe a Hacienda el fútbol también se pagarían 12 años de las cuestionadas ayudas al cine español.

Faltan fondos públicos, pero no para el balón. La Comisión Europea ha abierto una investigación a España por desviar dinero de los contribuyentes a los equipos más importantes del país. Europa cuestiona por qué el Estado permite que clubs como el Barcelona o el Real Madrid no sean sociedades anónimas deportivas, como manda la ley. No es irrelevante, porque implica ventajas fiscales: ahora pagan el 25% en impuestos, en vez del 30% que tendrían que pagar. Europa también investiga el pelotazo urbanístico que dio el Real Madrid con la permuta de un suelo que el ayuntamiento valoró en 22,7 millones cuando antes estaba tasado en poco más de medio millón. La UE también pregunta por Valencia, la zona cero del desastre español, donde los clubs de fútbol son entidades sistémicas, demasiado grandes para caer, y han sido rescatados por la arruinada Generalitat Valenciana.

3.

Dieciséis presidentes de Primera y División, además del presidente de la Liga Española de Fútbol, firmaron una carta pidiendo el indulto de José María del Nido, presidente del Sevilla, condenado a siete años de prisión por malversar casi tres millones de euros de las arcas municipales de Marbella entre 1999 y 2003. 14.000 personas más firmaron la petición del indulto.

4.

Cuando Lionel Messi, que ingresó 41 millones de euros en 2013 según France Football, tuvo que declarar por defraudar a Hacienda, recibió el apoyo de fans que fueron a aplaudirle. Otros fueron a insultarle. Gente comprensiva ha explicado que él no sabe de esas cosas de dinero. Es un genio en el campo, pero no fuera. Es joven; todo es cosa del padre. (Messi cumplirá 27 años en junio.)

5.

La FIFA sanciona al Barça por incumplir la ley de traspasos de menores. Según la nota de prensa de la FIFA, “Se constató que la RFEF y el FC Barcelona habían violado varias disposiciones relativas al traspaso y la primera inscripción de menores de nacionalidad extranjera en el club, así como otras normas relativas a la inscripción y participación de ciertos jugadores en competiciones nacionales. Las investigaciones versaron sobre varios menores inscritos en el club que participaron en torneos con el equipo durante varias temporadas entre 2009 y 2013”. La respuesta del presidente no tiene desperdicio.

6.

El antecesor de ese presidente había dimitido en enero, cuando se admitió a trámite una querella por administración desleal en el fichaje de un jugador. El club había dicho que había pagado 57 millones de euros. Después admitió que eran 86. El juez imputó al Barça porque sospechaba que podía haber defraudado 9,1 millones de euros y no tributar por contratos por valor de 37,9 millones. El juez aceptó que la Agencia Tributaria ejerciera la acusación particular. Como parte de una “regularización voluntaria”, el club entregó 13,5 millones de euros que debía haber pagado al hacer pasar por distintos conceptos lo que en realidad eran los contratos del jugador. El secretario de Estado para el deporte escribió un artículo titulado “Orgullosos del Barça”, donde decía: “No haría honor a la responsabilidad que me han confiado si callara mientras un escudo que ha aportado a nuestro deporte tanto como el que más es acosado y acusado. Ese escudo es patrimonio del deporte español, porque lo defendieron y defienden cientos de nuestros héroes”.

7.

La persona que tiró un plátano a Dani Alves era entrenador de fútbol base en el Villarreal. El club le ha prohibido entrar en su estadio. El seleccionador nacional Vicente del Bosque tranquiliza, diciendo que no hay racismo en el fútbol. Quizá tenga razón, aunque ha habidomás casos. Desde luego, es más convincente si lo dice él que si lo hubiera dicho su antecesor Luis Aragonés, que animó a uno de sus jugadores diciendo: “Dígale al negro: soy mejor que usted. Negro de mierda, soy mejor que usted”. Televisión Española, que presenta el vídeo con el título “El excesivo ímpetu de Luis Aragonés” y, como otros medios españoles, oculta la parte más escatológica de los consejos del sabio de Hortaleza, explica: “El ex-seleccionador nacional Luis Aragonés abrió una fuerte controversia, cuadno [sic] en un entrenamiento de la selección española animó a Reyes con unas palabras que no sentaron nada bien a la prensa inglesa”.

8.

Hace unas semanas, contaba Heraldo:

Dos individuos relacionados con los hinchas violentos del Real Zaragoza agredieron el pasado sábado al hijo de Agapito Iglesias y le causaron lesiones de las que fue asistido en un centro hospitalario. El joven presentó una denuncia en la comisaría de Centro, en el cuartel de General Mayandía, y se han abierto diligencias que están siendo instruidas por un juzgado.

Según confirmaron a este periódico fuentes cercanas al caso, la agresión se produjo en la noche del sábado al domingo, cuando el joven, de 24 años, estaba con sus amigos y amigas tomando unas consumiciones en un bar del centro de la capital aragonesa.

Sin mediar discusión alguna, según las mismas fuentes, dos jóvenes se le aproximaron y le golpearon. A raíz de la agresión, la víctima llamó a la Policía, que acudió al lugar e identificó a los presuntos autores del ataque, aunque no los detuvo. Pero la cosa no quedó ahí, ya que cuando el joven salió a la calle y se dirigía hacia la comisaría para presentar una denuncia por los hechos, fue golpeado de nuevo por los mismos individuos.

[…]

Aunque es la primera vez que se produce una agresión directa a un miembro de la familia del máximo accionista del Real Zaragoza, no es el primer ataque [que] sufren los Iglesias por parte de los hinchas más radicales del club. De hecho, durante una temporada, meses atrás, utilizaron las redes sociales para meterse con su hija.

 

[Imagen.]

UNOS ENLACES SOBRE UCRANIA, RUSIA Y PUTIN

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1.

Anatol Lieven: El único camino a la paz.

2.

La guerra falsa, por Tim Judah.

3.

La oposición en Ucrania: historia de dos mapas.

4.

Una entrevista con Frank-Walter Steinmeier, el ministro alemán de Asuntos Exteriores.

5.

Cómo Putin está reinventando la guerra, por Peter Pomerantsev.

6.

¿Puede Occidente encontrar la energía para contener a Rusia?, por Anne Applebaum.

7.

Los trolls de Putin.

8.

Cómo ganar una guerra de información.

9.

Putin no es poscomunista, es posfascista, por Jan Fleischhauer.

10.

Una conversación sobre la vieja Odessa.

[Imagen. Jerome Sessini/Magnum Photos]

¡NO PAREN LAS ROTATIVAS!

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1.

Escribe Víctor Lapuente:

El objetivo de nuestro periodismo (en las tertulias en particular, pero también en muchos de los análisis escritos) parece el opuesto: agregar problemas concretos en entes abstractos. En demasiadas ocasiones, los ciudadanos españoles no reciben un contraste de ventajas e inconvenientes sobre cursos de acción alternativos, sino un choque improductivo de cosmovisiones del mundo. Por ejemplo, en cuanto se sospecha que una reforma huele a derechas, movemos la discusión al terreno de la especulación progresista vaga: que si forma parte de una “agenda oculta” para desmantelar el Estado de bienestar, que si es una expresión más del “triunfo del neoliberalismo” o de la “incapacidad de la socialdemocracia para presentar una alternativa”, etcétera. Esta abstracción contribuye a que la mayoría de reformas que nuestro país necesita queden desprestigiadas rápidamente en el debate público.

2.

Mathew Gentzkow y la economía de las noticias.  Y: Resaca: ¿Qué fue del negocio del periodismo?

3.

¡A la mierda con Karate Kid!, por Jordi Pérez Colomé.

4.

Las nueve fases de la burbuja Piketty, por Robert Shimshley.

5.

Por qué a los periodistas les gusta cubrir ejecuciones, por Jack Shafer.

6.

¿De qué debe hablar el periodismo cultural?, por Peio H. Riaño.

7.

Cómo hacer notas de prensa, por Ben Goldacre.

8.

Cómo manipular una crítica cinematográfica, por Elisabeth Denys.

9.

Aplicaciones para traducir titulares virales hiperbólicos a lo que significan en realidad.

10.

Exagerando las cifras de los asaltos sexuales.

11.

«¿Hay alguien aquí que hayan violado y hable inglés?»

Lo mejor de Fleet Street, por Christopher Hitchens.

[La imagen es de la película Luna nueva.]

 

JAVIER TOMEO: AMADO MONSTRUO

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Javier Tomeo (Quicena, 1932 – Barcelona, 2013) fue un escritor singular, dueño de un mundo perturbador y único. Su obra tuvo siempre un carácter excéntrico. Estuvo alejada de las corrientes principales de la literatura española y parte de su reconocimiento se produjo inicialmente en el extranjero. Fue, como ha escrito Ismael Grasa, un gran escritor europeo. Y un autor que escribió hasta el final: este año se han publicado la novela El amante bicolor (Anagrama) y un conjunto de microrrelatos, El fin de los dinosaurios (Páginas de Espuma), donde tiene piezas como “Patíbulo”: “Los jueces me declaran culpable y me conducen al patíbulo. Cae la cuchilla de la guillotina y pierdo la cabeza. Una vez cumplido ese trámite le doy las gracias al verdugo y regreso a casa”.

Rafael Conte escribió: “viene del mundo de las pesadillas, de lo fantástico y lo onírico, recuerda en suave –y subrepticio– a Kafka, a Buñuel, al surrealismo, a Charlot, a Buster Keaton o al gran Ramón Gómez de la Serna”. Su escritura jugaba con el absurdo, el misterio y la intuición lírica. Emparentado con Goya y Bernhard, a medio camino entre el existencialismo y La Codorniz, a veces era un poeta, otras un humorista y en ocasiones un visionario; a menudo, era las tres cosas a la vez. Es la combinación que aparece en sus obras más conocidas, como El castillo de la carta cifrada (Anagrama, 1979), Amado monstruo (Anagrama, 1985) o El cazador de leones (Anagrama, 1989), y en muchas de sus piezas breves, reunidas en Cuentos completos (Páginas de Espuma, 2012).

Tomeo generaba lectores apasionados y fieles. Una de las aficiones de sus amigos, y de editores leales como Jorge Herralde, Enric Cucurella y Juan Casamayor, era hablar de Tomeo y de sus excentricidades. Hay una lista de anécdotas célebres, que podrían inspirar una versión de Broadway Danny Rose. Todas transmiten cierta perplejidad: no era fácil entender cómo funcionaba la cabeza de ese aragonés afincado en Barcelona, que estudió Derecho y Criminología, vivió con sus padres hasta que estos fallecieron, trabajó en Olivetti, tuvo un matrimonio fugaz con una holandesa, escribió una historia de la esclavitud con un nombre falso y firmó un libro sobre la superstición y la brujería en Cataluña, y que contradecía un aspecto un tanto hosco y primitivo con textos precisos, desasosegantes y extraordinariamente perspicaces.

No cultivó una imagen de intelectual, aunque tenía conocimientos infrecuentes, sacados de lo que llamaba “libros herramienta”. Según Antón Castro, “sus personajes tienen mucho de él: son raros, inquietantes, escindidos, solitarios, salen a pasear de noche, parecen estar en la periferia del mundo y siempre están descolocados en aventuras peligrosas o perversas”. Incorporó muchos elementos a sus libros, pero sus temas fueron casi siempre los mismos: la soledad y la incomunicación, el amor y su imposibilidad, la dificultad para percibir y compartir el mundo, la certeza paranoica de un enemigo impreciso y la sensación de una vulnerabilidad interior. Su literatura estaba llena de monstruos, de seres incompletos o fuera de lugar, por razones físicas o psicológicas. Como buen humorista y como buen poeta, Tomeo era un gran analista del hombre y sus instintos: para él, el monstruo es una metáfora de la condición humana.

[Este texto salió en la edición catalana de El Mundo el 23 de abril.]

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